jueves, 29 de mayo de 2014

LA CARA OCULTA: Noche de confidencias


La clase comenzó sin más interrupciones. Mike resultó ser bastante duro, pero sorprendió a la joven cuando le mostró su lado más paciente; parecía no importarle el tener que repetir el mismo proceso de deducción constantemente o el explicar durante media hora el mismo ejercicio. En alguna ocasión Ollie intentó bromear con él para mejorar el ambiente, pero lo único que conseguía era que la regañara.

 Las horas pasaban estrepitosamente rápido y mientras la oscuridad de la noche acunaba con su manto a los alumnos del campus y las sumía en un profundo sueño, aquel dúo hizo frente a la magia de la noche y se mantuvo despierto, sin embargo no duró todo lo que les hubiera gustado. Las horas de estudio se atenazaron sin remedio en sus músculos y, caso sin darse cuenta, se dejaron vencer por el encanto de la luna.

Pasado un tiempo Ollie comenzó a abrir los ojos lentamente; sentía los párpados increíblemente pesados y todo su cuerpo estaba adormecido. Se estiró intentando así despejarse y, al ver todos los papeles que tenía encima de la mesa, se acordó de la clase de matemáticas; rápidamente miró a su compañero pero él permanecía profundamente dormido. Suspiró, por lo menos en aquella ocasión no podía reprenderla. 

Cogió su lápiz dispuesta a seguir con los problemas, pero aquel instrumento nunca llegó al folio, se quedó absorta observando el rostro de su compañero; su frialdad había desaparecido, en ese momento sólo era un joven de diecisiete años con una expresión dulce y tranquila, algo que nunca había visto en aquellas facciones, y su boca se entreabría, dándole un aire divertido. Algo dentro de ella se revolvió y sintió el extraño deseo de acariciar su bronceada piel; alargó su mano hacia él, pero al darse cuenta de lo que iba a hacer zarandeó su cabeza, cerró el puño, se levantó y se fue rápidamente a la cocina. Allí abrió el grifo y se lavó la cara intentando así volver a la realidad, ese chico la odiaba y, además, a ella le gustaba Dan, no podía sentir nada por Mike. 

Lo cerró y abrió la nevera para sacar dos latas de Coca-Cola; mientras las cogía se dio cuenta de algo realmente extraño; sí que había veces en las que parecía que Mike no la soportaba, pero la había ayudado en varias ocasiones sin pedir nada a cambio, la había protegido y la había salvado, esas cosas ¿Las haría alguien que te odia? Suspiró, cada vez estaba más confundida.

Volvió de nuevo al lugar donde estaban estudiando, pero al llegar descubrió que Mike había desaparecido. Examinó su habitación, sus cosas seguían allí así que no se había marchado; una gélida ráfaga de viento hizo que se estremeciera y entonces se dio cuenta de que habían abierto la ventana; dejó las latas y se asomó. 

Ahí estaba Mike, sentado en el ladeado tejado de pizarra; Ollie salió también al exterior y, con cuidado, se sentó al lado de su compañero.
Un escalofrío volvió a atenazar su cuerpo por lo que se abrazó, intentando así resguardarse del frío:- ¿Qué haces aquí? Debemos de estar a menos cinco grados como mínimo-.
Mike no apartó la mirada del horizonte:- Necesitaba despejarme y este era un buen sitio-.
Ella siguió la mirada de su amigo y observó el increíble aspecto que conseguía el bosque a la luz de las estrellas; era precioso y, a la vez, sobrecogedor. No pudo reprimir ante aquello una sonrisa:- La verdad es que es precioso, recuerdo que cuando era más pequeña mis padres nos llevaron a una ladera en mitad de la noche y nos mostraron la mejor vista que había visto en mi vida, aunque no tengo muy claro si me gustó por el lugar o por estar un poco con ellos-. Al instante Ollie se mordió el labio, quizás había hablado de más; miró a Mike, parecía distante y algo preocupado ¿Sería por algo que había dicho? Sabía que no debería preguntar, pero la curiosidad le podía:- ¿Y tus padres?-.
Mike se tensó un poco:- Qué pasa con ellos-.
Ollie suspiró:- Venga, cuéntame algo sobre ellos, mis padres son médicos ¿Y los tuyos?-.
-Será mejor que nos vayamos-. Dijo intentando evitar la pregunta.
Rápidamente Ollie le agarró de la manga:- Venga, tú conoces una parte de mi vida que nadie conoce, podrías sincerarte un poco conmigo-.
Mike frunció el ceño:- Tú me lo contaste porque quisiste, yo no te lo pedí, las situaciones son ligeramente distintas ¿No crees?-.
Sin embargo ella no quería ceder, ya no:- Por favor-.
Se mantuvo callado durante unos segundos, luego suspiró, dándose por vencido:- Mi padre era científico y en ocasiones misionero, mi madre es profesora en Málaga  pero dejó de ejercer hace seis años a causa de un cáncer, tengo tres hermanos pequeños, los mayores chicos y la más pequeña una niña; ahora mi madre se encuentra sola cuidando de mis hermanos mientras recibe el tratamiento-.
Se quedó petrificada, no pensaba que su situación familiar fuera tan desastrosa:- ¿Y tu padre? ¿Por qué no le ayuda?-.
Él cerró con fuerza los puños:- Mi padre fue asesinado hace cinco años-.
Ollie sintió cómo se derrumbaba por dentro, sabía que debía dejar la conversación en aquel punto pero su curiosidad la quemaba:- ¿Saben quién lo asesinó?-.
Mike cerró los ojos:- La policía no, pero yo sí-. 

Se quedaron los dos sumidos en un completo silencio, él no continuó y ella no se atrevió a preguntar más. Un nuevo escalofrío recorrió el cuerpo de Ollie, cada vez sentía más frío; Mike pareció darse cuenta así que se quitó la sudadera, se la puso a ella sobre los hombros y se levantó.
-Será mejor que sigamos con la clase, entremos-.
Ollie observó al joven mientras volvía a su habitación, todavía sorprendida y, cuando hubo desaparecido, apretó con fuerza la sudadera y sonrió; una extraña felicidad se apoderó de su ser, era la primera vez que era amable con ella de una manera tan evidente y, seguramente, fuese debido a la unión que se había formado entre ellos gracias a las vivencias que habían compartido.
-¡Ollie!-.
Ella se sobresaltó:- ¡Ya voy!-.

Y terminado aquel rato de confidencias siguieron con los estudios lo que quedaba de noche, aunque con una atmósfera más afable e íntima.

martes, 20 de mayo de 2014

Dibujo: Azusa de K-On

¡Nuevo dibujo!
Este personaje es de una serie muy popular en el mundo anime (según tengo entendido), es de K-On y este es el preferido de mi hermana.
¡Espero que os guste!

viernes, 16 de mayo de 2014

¡Concurso literario!


¡Hola a todos!:

El concurso literario al que me refiero es uno que ha organizado el club de escritura de fuentetaja. El tema es "la familia" y con él tenemos que presentar unas fotos o un vídeo que estén relacionados con lo que hemos escrito.

La convocatoria ya está cerrada, ahora es el momento de votar.

Es una votación abierta por lo que todo el que quiera puede meterse y votar por sus relatos favoritos.
Yo me presenté hace unos días por lo que mi relato ya está subido en la página de fuentetaja. Me gustaría mucho que os paséis, leáis mi historia y, si os gusta, votéis por ella.

Decidí escribir un resumen sobre la vida de mis abuelos que no fue nada fácil, es un tema muy importante para mi familia y para mí. 

Es verdad que no llegué a conocer a mi abuelo, pero por algún motivo, siempre he sentido una extraña conexión con él; quizás sea por la de veces que me han contado la manera en la que luchó por seguir adelante, no lo sé, el caso es que he aprovechado esta oportunidad para compartirla con vosotros.

Os dejo el enlace por si os interesa :)

Si os gusta no lo olvidéis... ¡Votarla!


jueves, 15 de mayo de 2014

Vídeo: Tributo a las madres (parodia)


En el vídeo que vais a ver en esta entrada mi hermana y yo parodiamos algunas de las situaciones que más caracterizan a las madres, o por lo menos a la nuestra.
En realidad es parte de un regalo que le hicimos por el día de la madre, no lo iba a subir pero varias personas que lo han visto me han animado a hacerlo. Por supuesto la parte más emotiva la hemos quitado (ya que es algo especial para ella) y lo hemos transformado en un homenaje a las madres del mundo.

¡Espero que lo disfrutéis!

https://www.youtube.com/watch?v=RKJRaGmqF_4

La fuerza de vivir (4ªparte)

Esta es la cuarta parte de la historia que empecé a subir hace unas semanas, si no os habéis leído las anteriores os recomiendo que lo hagáis antes de seguir con esta.
¡ESPERO QUE OS GUSTE!


Mi director decidió que lo mejor para solucionar aquel contratiempo era realizar una entrevista televisiva, las pocas veces que había estado en un plató de televisión había conseguido mantener la calma, pero en aquella ocasión no podía dejar de morderme el labio y enroscarme mechones de pelo entre mis dedos. Sabía lo que tenía que decir pero me preocupaba que mis fans hubiesen perdido totalmente la confianza en mí, además las miradas inquisitivas que me lanzaban las personas con las que me cruzaba no ayudaban demasiado. Respiré hondo al prepararme para salir al plató, si no me controlaba mi carrera habría terminado y todo el trabajo de mis compañeros habría sido en vano.

El presentador me llamó, tenía que salir a escena pero mis piernas no me obedecían ¿Qué me ocurría? Busqué con la mirada a Óliver, le necesitaba, pero no había ni rastro de él ¿Dónde estaba? ¿Por qué no había sabido nada de aquel muchacho desde la entrevista de Saray? ¿Tanto daño le había hecho? 
Escuché de nuevo la voz del presentador pronunciando mi nombre; en el último momento quise salir huyendo pero alguien me empujó y me obligó a salir. Todas las miradas se clavaron en mí, ya no podía dar marcha atrás, si lo hacía estaría admitiendo que lo que dijo Saray era cierto. Me acerqué al asiento que me habían asignado, tambaleante, y noté un fuerte pinchazo en el corazón que me dejó sin respiración; tenía que tranquilizarme, si no lo conseguía iba a darme un ataque delante de cientos de personas. 

Cuando empezamos casi no fui consciente de las palabras que salían de los labios del hombre que tenía a mi lado, la habitación estaba comenzando a moverse de un lado a otro y por más que intentaba controlar mis pulsaciones no era capaz. El periodista estaba a punto de darme la palabra, tenía que encontrar una solución; cerré los ojos con fuerza unos segundos y, cuando los volví a abrir, el mundo se congeló ante mí.
Allí estaba esa mirada que tantas veces había conseguido sacarme una sonrisa, a causa de los focos no conseguía verlo con claridad, pero estaba segura, Óliver acababa de meterse en el plató y bajaba por las escaleras en busca de un asiento.

-Jess... Jess ¿Me escuchas?-.
La voz del presentador me despertó de golpe; parpadeé varias veces e intenté concentrarme:- Sí ¿Qué me decía?-.
Él me sonrió:- Parece que estás un poco nerviosa-.
Se la devolví y asentí:- Un poco, sí-. Luego miré de reojo a Óliver; de algún modo su presencia había conseguido tranquilizarme, parecía que mi corazón estaba controlado de momento.
-Tengo entendido que querías hablarnos de algo, apuesto lo que quieras a que es sobre las acusaciones de la cantante Saray-.
Asentí, había llegado el momento:- Pues sí, sólo quería…-. Pero me callé de golpe; mi presidente me había obligado a aprenderme un discurso donde aclaraba todas las blasfemias y dejaba por los suelos a Saray. Aunque no iba a decir ninguna mentira no podía hacerlo, no quería arruinar su carrera, yo no era así:- Sólo quería decir que seguramente ha habido un mal entendido, me disculpo con Saray si hice algo que la molestó y por eso me acusó de tales cosas, pero la situación no es así; no sé cómo habrá conseguido esa cinta que puso en el programa pero esa no era mi voz y, para demostrarlo, hoy después de la entrevista, voy a cantar así, en acústico, sin ningún instrumento acompañándome ni un micrófono, bueno, sí, este micrófono que me han puesto aquí que parece una pelusa-. El público se rió ante aquella pequeña broma:- Sobre lo del director, yo jamás lo había visto, y aunque lo hubiese visto no hubiese podido sobornarle, no tengo dinero ni para comprarme un helado en el parque-. Las risas volvieron a sonar:- Y mi madre… para mí es un tema delicado, ella fue muy especial para mí, cada día la echo de menos, por eso yo nunca usaría a mi madre para un fin tan ruin, es más, mi director no se enteró de nuestro parentesco hasta que Óliver se lo dijo cuando se lo conté a él-. Al decir su nombre se me contrajo el estómago:- Óliver me descubrió por casualidad, esa es la verdad, había tenido un mal día e inconscientemente me fui al auditorio, para mí ese lugar representaba alegría, algo que necesitaba; al llegar deseé con todas mis fuerzas que mis padres volviesen conmigo, que me abrazasen como solían hacerlo cuando no me encontraba bien, así que comencé a cantar su canción para sentirme más cerca de ellos, es una de las pocas cosas que me dejaron y lo necesitaba; él me escuchó y quiso que me uniese a su discográfica, eso es todo. Siento mucho que Saray lo haya mal interpretado-.

-Vaya, lo has pasado mal ¿Verdad?-. Me estremecí al recordar aquel día, pero no contesté:- Creo que después de esto lo has dejado todo bastante claro, aunque hay algo que sigue todavía en el aire-. Aguanté la respiración unos segundos:- ¿Es cierto lo de tus "amigos especiales" y lo de que insultaste a Saray?-.
-Por supuesto que no-. El presentador se rió ante mi reacción y al instante me sonrojé, había sido muy impulsiva, pero es que me molestaba mucho aquel tema, sobretodo por la discusión que habíamos tenido Oli y yo por su culpa.
-Lo siento-.
Él negó con la cabeza y calló al público:- No te preocupes, si esto tampoco es cierto es normal que te enfades-.
Suspiré:- No estoy enfadada aunque sí molesta; no sé quién le puede haber dicho eso pero nunca lo ha oído de mi boca; si fueses a mi colegio o a mi barrio podrían decirte lo poco popular que soy, no tengo muchos amigos y casi ninguno del sexo opuesto, aunque no lo parezca soy algo tímida y por ciertas circunstancias personales no me gusta encariñarme demasiado con la gente-.
-Si nos contases esas circunstancias personales lo entenderíamos mejor-.
Me mordí el labio, había hablado de más:- Si os contase todo sobre mí ya no sería tan interesante-.
-Yo creo que sí-.
-¿Podemos seguir con lo otro? ¿Por favor?-. El presentador debió de darse cuenta del cambio en mi estado de ánimo porque decidió concederme mi deseo.
-Claro, prosigamos-. Se aclaró la garganta y me hizo otra pregunta:- ¿Qué nos puedes decir ante la acusación de Saray? ¿Tampoco es cierto que la dijeses que es inferior?-.
Fruncí el ceño intentando encontrar alguna explicación que pudiese disculparla, pero en aquella ocasión no había ninguna:- Me temo que eso sí se lo inventó, quizás fuese debido a los otros rumores, no lo sé, no puedo daros una explicación, sólo os puedo decir que sólo la he visto un par de veces por lo que no he podido intercambiar más de una palabra con ella-. 

El público que había a mi alrededor comenzó a murmurar, no sabía si era debido a que no me creían o a que no entendían a Saray, fuera cual fuese el motivo no podía dejarlo así.
-De todos modos ¿En realidad importa si nuestra relación es buena o si Saray ha mentido o si yo salgo con muchos chicos? Es nuestra vida, somos como todos vosotros y cometemos errores. No sé Saray pero yo me metí en este mundo para disfrutar de la música y compartir con todos vosotros esos sentimientos que tengo cuando canto. Nunca he querido fama o reconocimiento, solo quiero que los demás puedan ver todo lo que puede ayudar la música, la alegría y la esperanza que puede haber en ella, el cómo puede sanar los problemas que residen en los corazones de las personas...-. Cerré los ojos un momento y pensé en lo que me había dicho el doctor tiempo atrás y en el peligro que corría haciendo aquello:- Quizás sea egoísta al luchar por lo que quiero, pero todos lo hacemos-. Respiré hondo y volví a abrirlos:- Si con esto no he llegado a convenceros, pensar en mis canciones, no creo que ninguno haya comprado mi disco o haya puesto la radio para escuchar mi canción pensando en mi persona, no os gusto yo, os gusta la canción y lo que hay en ella así que si decidís dejar de escucharme o dejar de escuchar a Saray que no sea por estos rumores, si dejáis de hacerlo que sea porque nuestras canciones no llegan a vuestros corazones y si decidís escucharlas sólo tened en cuenta la voz-.

En cuanto terminé de decir aquello el set se quedó en completo silencio, ni siquiera el presentador fue capaz de decir palabra, comencé a ponerme nerviosa ¿Qué quería decir aquello? ¿Tan ridículo había sonado? Cuando fui a disculparme por si se habían molestado el público me calló; comenzaron a sonar pequeños aplausos por la sala hasta que se convirtieron en un mar de estridentes sonidos, la gente comenzó a levantarse y el presentador se les unió. Una amplia sonrisa decoró mis labios, el alivio y la felicidad que me embargaron casi provocó que sucumbiera a las lágrimas, pero conseguí contenerme y levantarme:- Gracias, muchas gracias, de verdad-.
El presentador silenció a sus espectadores y nos volvimos a sentar, ya más relajados:- Eres increíble Jess ¿Te lo habían dicho?-.
-No-.
-Pues lo eres y nos has recordado a todos lo que de verdad cuenta en el mundo de la música, gracias-. Lo único que pude hacer fue sonreír, todavía estaba demasiado impactada:- Seguramente todos nosotros estaremos apoyándote. Ahora, volviendo a la entrevista y habiendo resuelto el mal entendido, querría hacerte una pregunta que nos interesa mucho a todos-.
Yo asentí:- Adelante-.
-¿Cómo es tu relación con tu compañero? ¿A qué punto habéis llegado?-.

Solté una risa nerviosa:- Sólo somos amigos-.
Él subió una ceja:- ¿Estás segura?-.
Miré de reojo a mi compañero y sentí cómo mi interior se retorcía, pero aún así asentí:- Completamente-.
Así la entrevista siguió su curso sin ningún obstáculo, la paz volvió a mi vida y los rumores cesaron.

martes, 13 de mayo de 2014

Un vínculo irrompible


“Hermanos”, una palabra que se utiliza con mucha frecuencia. No sólo nos sirve para denominar a dos personas que comparten un lazo de sangre, muchas congregaciones religiosas se apropian de ella para demostrar lo unidos que están sus integrantes, incluso entre amigos se llegan a denominar de esta manera. “Hermano” es una palabra hermosa que simboliza la unidad, pero no es tan simple, tiene un significado mucho más profundo, uno que no mucha gente conoce, uno que mi hermana y yo sí.

En todos los recuerdos que alberga mi corazón mi hermana está presente, por alguna razón mi cabeza no acepta la idea de que hubo un tiempo en el que no existió; nos llevamos cuatro años pero por mucho que intento recordar cómo era el estar sola en casa juntos a mis padres no puedo; la explicación más razonable es la de pensar que es debido a que era muy pequeña, pero algo me dice que en realidad es porque una vida sin ella me parece demasiado vacía.

Hemos crecido juntas. Presencié sus primeros pasos, sus primeras palabras, sus primeras sonrisas… todavía recuerdo la primera vez que la cogí en brazos y lo feliz que me sentí al saber que aquel bebé que parecía un juguete iba a formar parte de mi familia. Hemos reído y llorado juntas, jugábamos hasta que nuestros cuerpos no podían más y veíamos los mismos programas de televisión; llegó un momento en el que pensábamos que podíamos leernos la mente; incluso llegamos a decir que, en realidad, habíamos estado destinadas a ser gemelas, pero que por algún motivo no pudo ser.

El tiempo ha ido pasando y nuestra relación se ha ido fortaleciendo. En algunos casos pasa justo lo contrario, los hermanos se cansan entre ellos, dicen necesitar más privacidad y empiezan a distanciarse, pero a nosotras nunca nos han preocupado ese tipo de cosas, permanecíamos en nuestro mundo y nos olvidábamos de todo lo demás. Con los años compartimos más sueños, más deseos, más miedos y más secretos; nos apoyamos la una en la otra y nos ayudamos cuando alguna no está pasando por un buen momento.

Muchos son los que nos juzgan, no nos entienden, creen que no es natural que estemos tan unidas, que deberíamos estar cansadas de estar siempre juntas, pero por más que me lo dicen nada cambia.

No sé cuándo fue exactamente, pero en algún momento mi hermana se convirtió en mi mejor amiga, en mi confidente y en mi refugio, compartimos un vínculo tan fuerte que es difícil de describir, se ha convertido en parte de mí, somos dos mitades de un todo. Si a ella le pasase algo lo más seguro es que a mí también.

Hoy cumple diecisiete años, los mismos que llevamos juntas y no me arrepiento de ninguno de los momentos que hemos compartido, es más, espero que aumenten, no sé qué sería de mí sin nuestras noches de charla y diversión.

No importa lo mucho que cambiemos o lo lejos que estemos la una de la otra; es normal que, con el tiempo, nuestros caminos se separen, pero esto no quiere decir que nuestra relación vaya a cambiar; puede evolucionar y madurar, pero seguiremos siendo igual de inseparables porque una relación como la nuestra es imposible romperla.

¡FELIZ CUMPLEAÑOS AINOA!


Te quiero.

sábado, 10 de mayo de 2014

Blogger Lit Con



¡Buenas tardes a todos!:
Lo primero deciros que esta entrada es informativa, no vais a encontrar ninguna historia por mucho que bajéis ;)

Quería comunicar que este año el 7 de Junio voy a asistir a la ¡Blogger Lit Con!  
Se celebrará en el Retiro durante la feria del libro; me he enterado recientemente de este evento así que será la primera vez que asista Y ¡Estoy muy emocionada!

Para aquellos que no sepan qué es y les interese intentaré explicar en qué consiste, aunque tampoco puedo daros muchos detalles ya que lo que sé lo he descubierto leyendo su blog (pondré el enlace al final del artículo).

Es una quedada que han estado realizando durante cinco años, a ella suelen asistir personas amantes de la lectura, bloggers y booktubers principalmente así que si queréis asistir lo único que tenéis que hacer es rellenar un cuestionario que hay en su blog y... ¡Listo!
Te puedes apuntar a tres tipos de quedadas que son:
  • La pre-Quedada. (6 de Junio por la tarde)
  • La Blogger Lit Con. (7 de Junio de 10 de la mañana a 8 de la tarde).
  • La post-Quedada (8 de Junio)

Por supuesto no hace falta apuntarse a las tres, puedes apuntarte a la que quieras, yo lo he hecho a la pre-quedada que viene muy bien para conocer a las personas que van a asistir y a la blogger lit con que es el evento principal. La post- quedada tengo entendido que está más destinada a los booktubers.

Las actividades que se van a realizar:
Todavía no han especificado que se hará este año, cuando lo sepan lo subirán en su blog, por ahora lo único que os puedo decir es que normalmente se conocen escritores, se consiguen firmas y se realizan juegos. Los juegos creo que son la actividad principal de la quedada y se hacen después de la comida.

Os recomiendo que os animéis y os apuntéis, me han dicho que es muy divertido y que todo aquel que asiste está deseando volver a la siguiente, de hecho la cantidad de personas inscritas aumenta cada año, en el 2013 creo que fueron unas 200. Personalmente estoy deseando que llegue el día ¡Seguro que será una experiencia inolvidable!

Aquí os dejo el link por si queréis más información o queréis incribiros:

¡Hasta la próxima entrada!





viernes, 9 de mayo de 2014

La fuerza de vivir (3ªparte)

 Esta es la tercera parte de la historia que empecé a subir hace unas semanas, si no os habéis leído la primera parte y la segunda recomiendo que lo hagáis antes de seguir con esta.
¡ESPERO QUE OS GUSTE!



Cuando entré en el estudio el equipo ya me estaba esperando, preparados para hacer realidad uno de mis sueños. En aquel momento me dejó de importar la amenaza de Saray, lo único que tenía en mi cabeza era el deseo de querer volver a sentir a mi madre. Me encerré en la cabina, me puse los auriculares y me coloqué delante del micrófono; cuando estuve lista examiné de reojo a Óliver, este se dio cuenta por lo que  me saludó con la mano; avergonzada bajé la mirada y una sonrisa infantil salió de mis labios. Esperé a que el DJ me diese su aprobación para empezar y, cuando lo hizo, me volví a rencontrar con mis padres. Los sentía a mi lado, abrazándome y protegiéndome, dejé que la melodía entrase por los poros de mi cuerpo para poder percibirles mejor, casi podía palparles y ver sus rostros de nuevo. Sin darme cuenta la canción llegó a su final, aquellos tres minutos y medio llegaron a hacerse demasiado cortos y cuando mis labios se cerraron mis padres se desvanecieron. Suspiré agotada y miré a mi equipo.
-¿Qué tal?-.
El productor levantó el dedo pulgar:- Ha sido lo más hermoso que he oído nunca, ven a escucharlo y ahora continuamos-.
Sonreí y miré de nuevo a Óliver, se había levantado y me estaba esperando en la puerta, seguramente para abrazarme, se estaba acostumbrando demasiado a las muestras de afecto. Cuando dejé los auriculares y fui a reunirme con él uno de los asistentes pasó corriendo a la sala, nervioso.
-Tenéis que ver esto-.

Todos los allí presentes salimos tras él, miré dubitativa a Óliver pero él parecía igual de perdido. Cuando llegamos al salón el asistente señaló la televisión; era una entrevista que le estaban realizando a Saray, en cuanto la vi supe que iba a ocurrir algo terrible.
-Exacto, vengo a hablar de la nueva estrella de la canción, Jess-. Me acerqué aún más para poder oír bien:- Me veo en la obligación de contar que es una impostora, sobornó a la disquera para llegar hasta donde está, utilizó a su difunta madre para que le abriesen las puertas, es más, ni siquiera sabe cantar, esa voz que escucháis está totalmente retocada; mintió a mi compañero Óliver para conseguir una audición con el jefe,-. Mi canción comenzó a sonar en el plató, sin embargo aquella no era mi voz, sí que tenía un cierto parecido, pero estaba totalmente distorsionada; sin duda estaba manipulada:- También tengo que decir que esta chica no es lo que parece, seguramente la mayoría penséis que es muy inocente y amable, al fin y al cabo es la imagen que da, pero es todo lo contrario, se pasa el día saliendo con chicos distintos, los utiliza y luego los desecha como si fueran basura, todo esto lo sé porque cuando nos conocimos creí que podíamos ser amigas, pero me dijo que nunca se juntaría con alguien como yo, que era demasiado inferior-. Me llevé las manos a la boca ¿Por qué estaba mintiendo de esa manera? Yo no era así ¿Cómo podía decir todo aquello delante de las cámaras con tanta calma cuando sabía que nada era cierto?:- Me duele mucho haber tenido que sacarlo a la luz así, pero tenía que hacerlo, y no sólo porque así me quedo más tranquila, también porque veo injusto que vosotros y mi amigo Óliver esteis tan engañados -. La entrevista prosiguió pero yo no podía seguir escuchando, me cubrí el rostro para que ninguno de los presentes viese mis lágrimas y salí corriendo al pasillo. cerré la puerta tras de mí, arrastré mi espalda por la pared y, cuando llegué al suelo, me refugié entre mis piernas. Sabía que nadie saldría de allí hasta que terminase la entrevista así que tenía unos minutos para tranquilizarme y hablar con mi equipo, sin embargo la puerta se abrió antes de lo esperado; me quedé acurrucada esperando que fuese alguien que no me conociese y pasase de largo, pero no fue así.

-¿Quieres contarme algo?-.
El corazón se me paró, no había pensado todavía cómo afrontar una conversación con Óliver después de aquello; respiré hondo y le miré a los ojos:- Oli, es mentira, yo no he sobornado a nadie, no he utilizado a mi madre y muchísimo menos te he utilizado a ti-.
Él suspiró:- Todo eso ya lo sé, no me he creído nada-.
Estaba sorprendida, sentía que las lágrimas amenazaban con salir de nuevo:- ¿En serio?-.
-Lo único que quiero saber es si es verdad lo de... bueno... esos chicos-.
Su pregunta me crispó y los colores estallaron en mis mejillas:- ¡No! ¡Por supuesto que no!-.
Él desvió la mirada, parecía avergonzado:- ¿Seguro? Porque entendería que hubieras estado con otros  chicos o que estés, tampoco es que sea nada malo si no te has comprometido con alguien-.
-Dios Oli, para ya, sabes perfectamente que no es mi caso-. 
Nos quedamos unos segundos atrapados en un silencio incómodo, estaba intentando encontrar un modo de mejorar el ambiente cuando descubrí que las palabras que me había dicho no me gustaban nada.
-¿Has dicho que entenderías que estuviese con otros chicos?-. Me crucé de brazos, molesta:- Así que tú eres de esos que piensan que te puedes liar con una chica cada noche y luego hacer como que no las conoces-.
Óliver se inquietó e intentó arreglarlo:- No, no he dicho eso-.
Subí las cejas:- También has dicho que no es nada malo porque tú no te comprometes ni nada-.
-Estás tergiversando lo que he dicho-.
Fruncí el ceño y fingí pensármelo:- No, creo que lo he dicho casi exactamente igual que tú-.
-Bueno pues le estás sacando un doble significado-.
Solté una risa sarcástica:- ¿A eso se le puede sacar un doble significado? Qué sorpresa-.
-¿Acaso estás celosa? Porque es lo que parece-.
Se me formó un nudo en la garganta, era exactamente lo que me pasaba; carraspeé:- Claro que no, no tengo motivos para estarlo-.
Él sonrió:- ¿Estás segura?-.
Todo mi rostro se sonrojó, aunque no estaba segura si era por la vergüenza o por la ira:- Pues sí, idiota-.
Se rió:- Vaya, pues esa reacción la tendría alguien que está celoso-.
-¿No será que el que está celoso eres tú y por eso dijiste esa tontería?-.
-Pues mira, puede que sí-.
Estaba preparada para seguir con la discusión, pero aquellas palabras me enmudecieron; millones de pensamientos recorrían mi cabeza a la velocidad de la luz ¿Lo había dicho en serio? O ¿Era su manera de desarmarme? En caso de que fuese cierto ¿Qué quería decir aquello? ¿Significaba que le gustaba? Mi corazón comenzó a latir con celeridad, no tenía ni idea de cómo responder. 
-Jess-.
-¿Lo has dicho en serio?-.
Él se acercó un poco más a mí y me miró fijamente:- ¿Sería algo malo si fuese así?-.
Me quedé embelesada, observándole, por más que buscaba en sus ojos una prueba de que aquello era una broma no la encontraba, parecía muy sincero; mi corazón me decía a gritos que me tirase a sus brazos y que le soltase lo que de verdad residía en mi interior, aquellos intensos sentimientos que habían ido creciendo desde el mismo momento en el que le conocí; todo mi cuerpo se estremecía al pensar que podríamos estar juntos, pero una vez más mi cabeza consiguió imponerse ante mis deseos. 
Estaba enferma, podía morir en cualquier momento, no podía hacerle aquello, sería muy egoísta por mi parte.
Rápidamente bajé la mirada y me alejé un poco de él, pude imaginarme la decepción dibujada en su rostro así que cerré los ojos con fuerza y busqué una manera de salir de aquella situación.
-Será mejor que volvamos a la sala, tengo que aclarar muchas cosas ahí dentro-.
Me dispuse a meterme de nuevo con el equipo, pero Oli me agarró del brazo y me lo impidió:- Jess, espera-. Vacilé, sabía que debía mantener la compostura y seguir adelante, pero no podía continuar dañándole.
-Qué pasa-.
Suspiró:- Vale que yo sepa que todo eso es mentira, pero aquí lo que importa es que la gente te crea; hasta que no lo soluciones vas a escuchar muchas cosas desagradables así que tienes que ser fuerte ¿Entendido?
Asentí:- Está bien-.
Oli me soltó y se volvió de nuevo a mí:- No me estás ocultando nada ¿Verdad?-.
Me sobresalté ¿Acaso lo sabía?:- ¿Por qué me preguntas eso?-.
Él me sonrió y subió los hombros:- No lo sé, a veces tengo la sensación de que escondes algo-. Yo asentí pero no contesté, antes de llegar al estudio estaba dispuesta a contarle la verdad, pero ahora no me veía capaz.
-Será mejor que me vaya-.
Respiré hondo y le devolví la sonrisa:- Está bien, luego te llamo y te cuento cómo ha ido todo-.
-Hasta luego entonces-. Creí que se despediría con la mano y desaparecería por el pasillo, pero, en vez de eso, se acercó a mí, se inclinó y me dio un sutil beso en la mejilla. No supe cómo reaccionar, simplemente me quedé paralizada; él se rió un poco a causa de mi reacción y se marchó sin decir nada. Cuando me quedé sola me llevé la mano al lugar donde se habían apoyado sus labios y una risa tonta salió de mi garganta, sabía que no debía reaccionar de aquella manera, pero no podía evitarlo. 

Me mordí el labio, respiré hondo e intenté tranquilizarme, había llegado el momento de encontrar una solución al problema que había causado Saray.



Un intenso dolor me despertó de mi ensoñación; las máquinas que estaban conectadas a mí habían empezado a sonar como locas intentando de aquella manera avisar a los doctores de que algo no iba bien. Noté que alguien soltaba mi mano y salía corriendo al pasillo, seguramente habría ido a buscar ayuda ¿Acaso había llegado el momento? ¿Era este mi final? Comencé a angustiarme, no estaba preparada, no quería irme, era demasiado pronto; por primera vez desde que conseguí recuperar la consciencia sentí cómo mi cuerpo comenzaba a funcionar así que pataleé en un intentó desesperado por mantenerme con vida, quizás comportarme así empeorase las cosas, pero era lo único que se me ocurría, lo único que podía hacer para convencerme de que no me había muerto, de que podía seguir luchando. Unas manos empezaron a agarrar mis extremidades así que abrí los ojos y vi a un pequeño grupo de doctores rodeándome, aquello no me ayudó a tranquilizarme, es más hizo el efecto contrario. El dolor iba aumentando por momentos y, con él, el miedo; no pude evitar soltar un grito de espanto, no sabía que hacer, no sabía cómo reaccionar, lo único que sabía era que quería que acabase toda esa pesadilla. De reojo vi como un doctor inyectaba un líquido en la vía que tenía puesta en el brazo, pensé que podía ser algún medicamento para el dolor, pero cuando noté que todo mi cuerpo dejaba una vez más de obedecer supe que me habían puesto un calmante, no tardaría mucho tiempo en dormirme. Los doctores se tranquilizaron y me soltaron, fue entonces, justo antes de sumirme en la oscuridad, cuando un joven al que conocía muy bien apareció en mi campo de visión y me dio un beso en la mejilla.